El hermoso espacio concebido como una fusión de tienda de regalos, antigüedades, piezas únicas, y chucherías de lujo, se desdobla en sencillo comedor donde las pequeñas mesas, todas distintas, invitan a la amena conversación, el ambiente fresco y distendido permite pasar ratos amenos y comiendo rico.
Una larga lista de productos de marca propia, cositas deliciosas para comer allí: nosotros comimos el Sándwich Mediterráneo y la siempre provocativa Torta de la Abuela, delicadeces para llevar, en realidad hicimos un mercadito: Pan de tomates secos, grissinis y los macarons que tanto me gustan: sarrapia, vino tinto y limón.
Madame Blac es un espacio para disfrutar siempre.
Una larga lista de productos de marca propia, cositas deliciosas para comer allí: nosotros comimos el Sándwich Mediterráneo y la siempre provocativa Torta de la Abuela, delicadeces para llevar, en realidad hicimos un mercadito: Pan de tomates secos, grissinis y los macarons que tanto me gustan: sarrapia, vino tinto y limón.
Madame Blac es un espacio para disfrutar siempre.
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